Luego de seis años, la Corte Internacional de Justicia de La Haya entregó el pasado 27 de enero de 2014 el fallo judicial del litigio entre Chile y Perú por el trazado de delimitación marítima entre ambos países. La acción judicial presentada por el Gobierno de Perú ante la Corte en el año 2008, planteaba que los límites marítimos no estaban contenidos en los tratados existentes entre ambos estados.
La postura del Perú estaba asociada a plantear que la Corte Internacional de La Haya que estableciera una línea fronteriza a contar del Punto de Concordia (266), y que a contar de este punto se trazara una línea divisoria equidistante. Por su parte Chile contra argumentaba que los límites trazados habían sido respetados durante sesenta años, y que el acatamiento de los acuerdos existentes y establecidos por ambas partes, da cuenta de derecho sobre las zonas disputadas.
En definitiva la corte acoge uno de los principales argumentos de la defensa chilena, en relación a la fijación del límite a partir del paralelo que pasa por el Hito Uno, permitiendo mantener la proyección marítima de Arica y sus derechos pesqueros. Sin embargo, al fijar la línea equidistante desde la milla 80, implicará la pérdida de derechos económicos chilenos para una zona de 22 mil kilómetros cuadrados. El fallo entregado por la corte internacional es de carácter inapelable. El relator del fallo fue el Presidente de la Corte el Juez Peter Tomka.
El Presidente Sebastián Piñera en un mensaje al país por radio y televisión, planteó que se acatará el fallo, aunque recalcó que se tratará de un proceso "gradual". Por su parte, el Presidente peruano Ollanta Humala aseguró que el Tribunal de la Haya concedió un 70% de la petición del Perú. "Podemos confirmar la victoria de la paz, que es de todos, del pueblo peruano", planteó el primer mandatario peruano. |